La reducción del mineral de hierro se efectúa en un horno alto donde se añaden por el tragante los minerales de hierro en presencia de coque y fundente que actúa como escorificante. La reducción tiene como objetivo eliminar el oxígeno del mineral para pasar de un estado de óxido a condiciones metálicas.
El coque es el material que va a generar el gas reductor. El coque es encendido en la base del horno alto y el aire caliente soplado a través de las toberas a alta presión quema el coque para formar dióxido de carbono: C(s) + O2(g) → CO2 + Calor. La corriente gaseosa ascendente (CO2) choca con la corriente solida descendente (coque) formando 2CO (monóxido de carbono): CO2(g) + C(S) → 2CO(g).
Etapas de la reducción: